¿Qué haría usted si le dijeran que los recursos destinados a salvar vidas están en una encrucijada? El sector salud enfrenta una de las mayores crisis financieras de la historia, y mientras hospitales, pacientes y profesionales luchan con recursos limitados, los fondos que deberían estar asegurando la atención están siendo redirigidos. La pregunta es: ¿hasta cuándo puede soportar el sistema?
La revelación que dejó a todos en shock
En un reciente debate de control político, la senadora Norma Hurtado destapó una verdad impactante: la salud en Colombia tiene un déficit de 2,8 billones de pesos para el aseguramiento de este año. ¿Por qué? Porque el Gobierno ha optado por desviar fondos cruciales a programas que, aunque importantes, están dejando a miles de pacientes en espera de cirugías avanzadas y tratamientos para enfermedades graves
La infraestructura fantasma: millones invertidos, pero sin resultados visibles
Mientras los hospitales públicos suplican por recursos, el Ministerio de Salud asegura que ha invertido 1 billón de pesos en construir 44 hospitales. Pero, ¿sabe cuántos están realmente operativos? ¡Casi ninguno! La mayoría de estas obras ni siquiera ha comenzado, con una ejecución inferior al 12%. ¡Esto, a pesar de que los contratos fueron aprobados hace más de un año! ¿Dónde están estos recursos y quién va a responder?
El exministro Alejandro Gaviria, conocido por su visión crítica, también ha expresado su preocupación. «Están aprobando proyectos a la ligera», dijo, alertando sobre el riesgo de ‘elefantes blancos’: costosas infraestructuras hospitalarias que jamás llegarán a operar plenamente. Con advertencias como esta, no es extraño que la confianza en el manejo de los recursos de salud esté por los suelos
¿Qué significa esto para la atención de millones de pacientes?
Muchos colombianos están cada vez más cerca de tener que pagar de su bolsillo para acceder a servicios básicos si es que ya no lo están haciendo… Este déficit millonario también afecta a cada paciente que necesita atención, especialmente aquellos con enfermedades crónicas o complejas. Con un gasto en salud que ya amenaza con desbordarse, es cuestión de tiempo antes de que el sistema colapse si no se toman decisiones rápidas.
La gran pregunta: ¿Salud o política?
Los analistas coinciden en que los recursos en salud están siendo usados como una «mermelada» para favorecer objetivos políticos, y esta práctica tiene graves consecuencias. Al gastar más de lo que se ingresa, las EPS están acumulando deudas a niveles históricos y perdiendo capacidad para responder a la demanda creciente de servicios. Con una tasa de siniestralidad del 116%, las EPS están pagando 16 pesos por cada 100 pesos recibidos en servicios de salud, algo que no pueden sostener por mucho tiempo
¡El sistema está al borde del colapso! Errores en la Unidad de Pago por Capitación (UPC) y desvíos de recursos han llevado al límite un sistema que ya no puede soportar más. Médicos sin herramientas, pacientes sin atención y zonas rurales olvidadas son apenas el inicio de una tormenta que está a punto de desatarse.
¿Qué sucederá?
Con un presupuesto general ya aprobado, el panorama para el próximo año no parece alentador. Las EPS y hospitales han dejado claro que, sin un ajuste significativo en la financiación de la UPC (Unidad de Pago por Capitación), las deudas seguirán creciendo, y la atención en salud sufrirá aún más. Si el Gobierno no escucha el llamado, las consecuencias podrían ser irreversibles.
¡Este es el momento de exigir que los recursos de la salud se gestionen de manera transparente y responsable!
En Coco Tecnologías, creemos en un sistema de salud justo y sostenible. Por eso, trabajamos para fortalecer los procesos digitales que conectan a instituciones, profesionales y pacientes, aportando soluciones tecnológicas que marcan la diferencia. Nuestro compromiso es apoyar al sistema de salud colombiano en su transformación, creando un acceso más eficiente y humano para todos.
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